04 mayo 2023

No estaba para ti

No estaba para ti…
No estaba para ti la vida que soñaste, la casa que no habitaste, el beso que no diste, las palabras que no te dijeron, el viaje que al final no hiciste, el amor que dejaste ir. No estaba para ti aquel trabajo, ni aquel instante imaginado, ni el final de aquella noche ni el comienzo de aquel fin. Te quedas siempre a las puertas del paraíso, y te dices que, total, tampoco es para tanto, si no estaba para ti. Y te consuelas pensando que hay otros mundos que no están en éste, que hay otros días, que al final no vas a vivir; porque estaban para otros, porque no estaban para ti.
No estaba para ti toda la gente que se fue tan pronto, los recuerdos que se perdieron, los momentos que no ocurrieron, los años junto a aquellos que ya no están. No estaba para ti la fiesta que te perdiste porque no te invitaron, o porque no quisiste ir; el helado que no te comiste porque decías que ya estabas lleno, la penúltima copa, un último abrazo. No estaba para ti aquella noche de estrellas, aquel tramo oscuro del lago que te daba miedo. No estaba para ti que la esperanza te sorprendiera con algo cierto que hubiera detrás, con algo más que solo esperar. Solo de vez en cuando, consigues traspasar hacia el mundo onírico de aquello que pudo ser pero que al final no fue. Como quien se engaña mirando a través de un espejo engañoso y turbio. Como quien mira hacia atrás buscando en qué lugar se bifurcó el camino para acabar de pronto aquí; contra todo pronóstico, derrotado pero indemne.
Y es que todo eso al final no estaba para ti… Y así, siempre.
©Javier Vidal
Imagen: Arlequín con espejo. Pablo Picasso